Pozo-Lorente es un municipio español situado al sureste de la península ibérica, en la provincia de Albacete, dentro de la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha. Pertenece al partido judicial de Casas-Ibáñez. Perteneció durante la Edad Media al Estado de Jorquera, dentro del marquesado de Villena.
Su principal recurso es la agricultura, destacando los cereales y el viñedo, cultivo de frutos secos (almendros, pistachos…) y olivos. Cuenta con una cooperativa vitivinícola. También es importante para la economía y la tradición del pueblo la caza, con importantes cotos de caza mayor y menor.
Pozo-Lorente es un municipio español situado al sureste de la península ibérica, en la provincia de Albacete, dentro de la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha. Pertenece al partido judicial de Casas-Ibáñez. Perteneció durante la Edad Media al Estado de Jorquera, dentro del marquesado de Villena.
Su principal recurso es la agricultura, destacando los cereales y el viñedo, cultivo de frutos secos (almendros, pistachos…) y olivos. Cuenta con una cooperativa vitivinícola. También es importante para la economía y la tradición del pueblo la caza, con importantes cotos de caza mayor y menor.
En los primeros años del siglo XIII Pozo Lorente pertenecía al Concejo de Alarcón. Después de la Reconquista a finales del siglo XV, la provincia se vuelve a diversificar en comarcas para pasar a continuación al Marquesado de Villena, formando el llamado Estado de Jorquera. No alcanzó su autonomía hasta el siglo XIX.
La evolución demográfica de Pozo-Lorente en el siglo XX describe una gráfica singular, ya que entre el 1900 y el 1950 la población llegó casi a duplicarse. A partir de ese momento y hasta el 1980 desciende, y actualmente cuenta con 386 habitantes. Como en la mayoría de los pueblos de nuestra provincia, en verano la población puede llegar a triplicarse.
Iglesia parroquial de Santa Ana
Su origen data del siglo XVIII y aunque ha sido restaurada recientemente, se ha pretendido conservar fielmente sus peculiaridades iniciales. El templo tiene una única nave, no hay capillas a los lados. La sacristía y los salones están en la planta baja y arriba se encuentra la casa parroquial. La Santa Cruz es una joya religiosa bañada en plata y tan reluciente que llama la atención al primer golpe de vista. Permanece todo el año en la iglesia y el día 3 de mayo el pueblo la sube al Calvario en procesión.
Vísperas a la llegada de las fiestas, las mujeres de Pozo Lorente elaboran los típicos rolletes de la Santa Cruz que se bendicen en el Calvario y luego reparten entre los presentes en la procesión, se prenden en la solapa con un alfiler y un lazo, al adquirirlos es común dejar un donativo para la iglesia, también en la bajada de la Santa Cruz a la Iglesia, se hace un alto en el camino, en la Plaza Santa Cruz y se reparte un rollo de masa más grande elaborado por las panaderías de los pueblos próximos.
Alberga además la parroquia, un Cristo tallado anterior a la guerra civil y un Sagrario de los años cuarenta aproximadamente, que trajo al pueblo el alcalde que ejercía en aquellos días. La talla del Cristo se cuenta que desapareció durante la guerra, posiblemente porque algún vecino lo guardara evitando que pudiera ser dañado, para volver a aparecer después de terminado el conflicto.
La talla de Santa Ana es de madera y se creó en los años cuarenta. El día 26 de julio se saca en procesión, en honor a las fiestas patronales que se hacen en su nombre. Pero debido a su peso se pensó en construir otra de menor envergadura. La postura de las tallas es distinta, por lo que son fácilmente identificables. Podemos contemplar también la imagen de San Isidro.
Una de las joyas mejor guardadas en este municipio es su monumental reloj que data de 1954, ubicado en la torre de la Iglesia. Es una singular pieza que se realizó con materiales de máxima calidad, quizá por ello todavía pueda realizar su servicio a la perfección.
Área Recreativa de la Ermita de San Isidro
Cuenta con una composición sencilla, moderna y arqueada, donde se lleva cada 15 de mayo la imagen del santo en romería y en la ermita se celebra la misa en honor a San Isidro Labrador. También cuenta con una instalación equipada que es reservada por los habitantes de la localidad, para celebraciones entre familiares y amigos.
Naturaleza y rutas senderistas
A unos 3 kilómetros del casco urbano, se divisa un pino rodeno ancestral que sobrevive insolente al paso del tiempo.
El término municipal de Pozo Lorente, cuenta con bonita sierra que podemos disfrutar realizando varias rutas senderistas: Ruta de la Ermita-las Carrascas, Ruta de los Molinos, Ruta de las Casillas, Ruta del Vallejo de la Cueva.
Durante estos recorridos, en el paisaje, nos podemos encontrar varios cucos, la construcción típica de La Mancha albaceteña, hecha con piedra y de forma semiesférica. Su función originaria era la de servir como refugio de pastores.
También podemos encontrar, en etapas en que las lluvias son abundantes, un manantial de agua, en la llamada Fuente Jordana.